Azul
Quiero respirar, con tu palpitar bajo tus sábanas, azul.
Hay días en que solo quisiera que vinieras a por un abrazo y volvieras a París.
Los momentos de encontrar una luciérnaga en lo espontáneo, le hace falta magia si tu no sujetas mi mano al caminar.
Me doy ánimos, pero es difícil
Difícil cuando tengo el recuerdo tan presente del peso de tu brazo en mi cintura y una naricita mojada viniendo a despertarnos.
La añoranza se va, se va y viene la alegría
Mi ojitos brillan nuevamente al ver el pescadito azul para dejar inciensos
La pena corre como un flujo cuando riego las espinacas que planté
Mi corazon se llena de sabiduría cuando reparo en que me regalaste tantas cosas vivas
El happy-pasto llamado Lilo, las semillas de hortalizas, el ají floreciendo
La convicción de hacer las cosas ahora, de concretar obstáculos en el presente.
El otro día encontré un texto que me mandó de lleno a estudiar EDO.
"No te tardes mucho, te espero toda la vida" Oscar Wilde
No me tengo que tardar tanto en lo que estoy haciendo ahora, es solo un paso para salir a la libertad del mundo. Nos espera toda una vida de aventuras, de comer quesos y tomar vinos, de bailar y hacer piruetas, de pensar profundo y soñar nuevos viajes, de reír y reír mas aun!
Rojo
ResponderEliminarCada mañana te recuerdo con pasión y mis sueños lo corroboran.
Esos pajaritos que sonaban cada ves al despertar que me hacían recordar quien estaba al lado mio.
Apapacharnos como nosotros lo sabemos hacer sincero y del corazón es lo nuestro.
Un amor sin prejuicios ni pasado solo un ser que evoluciona y crece junto a nosotros.
Un pelo chascon con una sonrisa enamoradiza y ojos que dicen deseo amor es lo que me engatusaban cada mañana y que extraño con delirio.
Tu olor y caricias, recorrer tu cuerpo sin descuidar ningún milímetro con pasión y delicadeza, escuchando tu fuerte palpitar y respiración son unas de las tantas cosas que no olvido.
Tus cuentos revolotean en mi cabeza, me hacen viajar a tu sonrisa y me sacan más que una sonrisa.
Entre tantos buenos momentos que añoro es el tenerte de nuevo sobre mi pecho, mirarnos y solo reírnos de lo felices que somos.
Hermes C.