Dulce Lonquimay

 Había una vez una tierra tan dulce, que uno tenía que atravesar un cuchuflí para llegar a un pueblito; donde en el horizonte se ve un gran pie de limón alzándose a los cielos, creciéndole entremedio diversas especies de chocolate en rama con verde algodón de azúcar colgando. Al andar entre los valles del merengue, uno se encuentra con el pastel Mahuida muy cerca de las lagunas Icaramelo y Galleta. De vez en cuando, todos se tienen que entrar porque espolvorean azúcar flor desde el cielo y queda cubierta la tierra de un rico y suave helado de piña.

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