Oda a tu pie de limón
Contemplo la danza de tus manos Mientras mezclas esos polvos blancos Con esa sustancia amarillesca grasosa Entre bate que bate el claro se espesa Y le nieva dulzura de navidad Que al final solo un soplete amorena Se huele su aroma cítrico ahí apoyado en la mesa Sus montañas insinuante a te saludan Clamandote por piedad un mísero mordisco Mordiendo solo las puntas Puedes calmar la angustia que les oprime el pecho Ser saboreado por los más dulces labios Que atraviesan las nubes para encontrarse con el mar Mar de leche condensada y galletas Mezcla perfecta digna de animas que encuentran El paraíso perdido del pie de limón